Es un tierno y, a la vez, duro relato que narra las peripecias de aquellos niños y niñas obligados a salir de España para ser protegidos de la crueldad de la Guerra Civil, un conflicto que nunca debió existir.
El libro se centra en la experiencia del exilio de estos menores. El protagonista, Santiago Celaya, es un trasunto del autor en su niñez como exiliado, y la novela se esfuerza por reconstruir sus sentimientos durante ese destierro. El relato cuenta cómo logra salir adelante, tanto en la organización de su vida diaria como en la recomposición de su mundo interior mientras convive con una familia en Bélgica, lejos de sus padres y de su país.
 
Editorial : Luis de Castresana, 1968
 
Estado: bueno | Tapa blanda 
 
Páginas:  219
 
Medidas: 12 x 20 cm