El melancólico es, casi siempre, un hombre que lee demasiado. El ojo humano no está hecho para esa distancia; su reposo son los grandes espacios. Cuando miráis las estrellas o el horizonte, vuestros ojos están completamente relajados; si los ojos están relajados, la cabeza está libre. el paso se hace más firme; todo se relaja y suaviza hasta las vísceras. Pero no trates de suavizarte mediante la voluntad; tu voluntad, ejercida sobre ti, lo hace todo al revés y acabará por estrangularte; no pienses en ti; mira a lo lejos.

Estado: Muy bien | Tapa dura con sobrecubierta ilustrada | Unas letras en primera página de anterior propietario.
 
Editorial: RBA Libros, S.A. | 1ª Edición | 2003
 
Páginas: 353
 
Medidas: 21'5x14 cms.
 
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